La Unión Europea intensifica la lupa sobre gigantes Chinos: Shein y Temu

La preocupación de la Comisión radica en el exponencial aumento de paquetes que ingresan a la Unión Europea, principalmente desde China. El comisario europeo de Democracia, Justicia, Estado de Derecho y Protección del Consumidor, Michael McGrath, ha sido enfático en la necesidad de que estas plataformas se adhieran estrictamente a las normativas europeas.

Según datos oficiales de la Comisión, el año 2024 vio cómo el número de productos que entraron a la UE a través de estas plataformas se duplicó en comparación con el año anterior, alcanzando la asombrosa cifra de 4.600 millones de envíos. De este total, un abrumador 91% provino de China, y la mayoría de estos paquetes tenían un valor inferior a los 22 euros.

La UE busca así proteger a sus consumidores y garantizar una competencia justa en su mercado digital

Ante este escenario, Bruselas ha instado al Consejo de la Unión Europea y al Parlamento Europeo a acelerar la reforma aduanera. El objetivo principal es eliminar la exención de aranceles para los envíos con un valor inferior a 150 euros y reforzar significativamente la vigilancia sobre la aplicación de las Leyes de Servicios Digitales (DSA) y de Mercados Digitales (DMA).

Además, la Comisión ha solicitado a las autoridades nacionales de los Estados miembros que intensifiquen las campañas de información y prevención dirigidas a los consumidores, alertándolos sobre los riesgos asociados a la compra de productos ilegales o peligrosos a través de estas plataformas. En un esfuerzo por promover la sostenibilidad, Bruselas también ha anunciado que presentará un plan para implementar la normativa sobre diseño ecológico y sostenibilidad de productos durante la primera mitad de 2025.

Estas acciones por parte de la Unión Europea se enmarcan en un contexto de creciente tensión comercial a nivel internacional. La decisión de Bruselas sigue a medidas similares tomadas por Estados Unidos, que recientemente suspendió la llegada de paquetes de Shein y Temu procedentes de China y Hong Kong, reflejando una preocupación global por las prácticas comerciales de estas empresas.