Día Lunes, 15 de Diciembre de 2025
Alberto Fernández Carnicero, experto en economía, advierte sobre las tensiones geopolíticas y el proteccionismo como riesgos económicos significativos para el próximo año.
![[Img #60917]](https://empresaexterior.com/upload/images/01_2025/456_alberto-fdez-carnicero_2102.jpg)
En un contexto global marcado por la incertidumbre, Alberto Fernández Carnicero, gestor de renta variable en Mutuactivos y docente de Next Educación, ha declarado que “se espera una estabilización del crecimiento económico mundial en 2025”. Sin embargo, subraya que hablar de un crecimiento uniforme es complicado debido a las diferentes tendencias entre regiones geográficas.
En sus declaraciones, Fernández Carnicero destaca que China enfrenta una evidente desaceleración económica. Factores como el riesgo en el mercado inmobiliario y una burbuja de crédito han contribuido a esta situación desde 2023. Además, señala que “el consumo chino ha mostrado una ralentización significativa”, tendencia que podría continuar este año.
Existe una tendencia clara hacia el proteccionismo, tanto en Estados Unidos como en Europa
Por otro lado, Estados Unidos experimentó un crecimiento del 3,1% en el tercer trimestre de 2024 y se anticipa un aumento anual del 2,8%. Para 2025 se estima un crecimiento alrededor del 2,5%, lo cual indica “un aterrizaje suave” sin grandes sobresaltos económicos.
En cuanto a Europa, después de un moderado crecimiento en 2024, se espera una leve recuperación económica este año. Sin embargo, las economías emergentes podrían enfrentar un ritmo más lento debido a la desaceleración global.
Fernández Carnicero también alerta sobre los desafíos para 2025: “las tensiones geopolíticas podrían continuar o agravarse”. Aunque los mercados han absorbido estos riesgos a corto plazo, su impacto podría ser mayor si afectan a economías más grandes. Además, resalta la clara tendencia hacia el proteccionismo tanto en Estados Unidos como en Europa: “la imposición de aranceles genera desequilibrios económicos y procesos inflacionarios”.
Finalmente, menciona la vulnerabilidad económica de China y cómo muchas empresas europeas con intereses allí han registrado decrecimientos significativos en sus resultados durante 2024. Concluye afirmando que “el proceso de aterrizaje del consumo en China será clave para determinar si la desaceleración económica será suave o más pronunciada”.









































