Empresas chinas buscan sortear barreras comerciales en el sector de energía verde

Los vehículos eléctricos, las baterías de iones de litio y los productos fotovoltaicos, conocidos como las "nuevas tres" categorías de exportación de China, han experimentado un notable crecimiento en los envíos al extranjero en los últimos años. Impulsadas por la acelerada transición global hacia la energía verde, el volumen anual combinado de exportaciones de estos productos superó los 1.06 billones de yuanes (148.3 mil millones de dólares) el año pasado, según la Administración General de Aduanas de China.

China ha establecido una posición global de liderazgo en las cadenas de valor de estas industrias emergentes, gracias a las economías de escala y la continua innovación tecnológica, afirmó Liang Ming, director del Instituto de Comercio Internacional, que forma parte de la Academia China de Comercio Internacional y Cooperación Económica.

No obstante, el aumento del proteccionismo comercial en ciertos países ha planteado desafíos a la expansión global de los tres nuevos sectores exportadores de China. En mayo, Estados Unidos decidió aumentar significativamente los aranceles sobre una gama de productos chinos del sector de tecnología verde. Además del aumento de aranceles del 25% al 100% en los vehículos eléctricos chinos, los gravámenes sobre las baterías de litio subirán del 7.5% al 25%, y los de las células solares del 25% al 50%.

Siguiendo los nuevos y estrictos aranceles de Washington, la Unión Europea anunció en julio que se impondrán aranceles adicionales provisionales de hasta el 37.6% sobre los vehículos eléctricos fabricados en China.

"A pesar de reconocer la importancia de estos sectores, tanto Washington como Bruselas carecen de la ventaja competitiva que disfruta China, lo que los ha llevado a implementar políticas proteccionistas para crear espacio para sus propias industrias nacientes", explicó Liang Ming, director of the Institute of International Trade.

Para enfrentar estos desafíos, las empresas chinas están tomando medidas proactivas como el establecimiento de plantas de fabricación en el extranjero y la diversificación de los destinos de exportación, según analistas. En junio, entró en vigor un acuerdo de libre comercio entre China y Serbia, en el que ambas partes acordaron eliminar aranceles en el 90% de las líneas arancelarias de manera recíproca. Esto incluye exportaciones clave de China como automóviles, módulos fotovoltaicos y baterías de iones de litio, cuyos aranceles se reducirán gradualmente del rango actual del 5-20% hasta llegar a cero al ingresar al mercado serbio.

Aunque el tamaño del mercado de Serbia no se traduzca directamente en un volumen significativo de exportaciones para los productos verdes de China, el acuerdo China-Serbia tiene una importancia estratégica a largo plazo para expandir estas tecnologías de energía limpia en el mercado europeo, afirmó Dong Zhongyun, economista jefe de AVIC Securities.

Las exportaciones de los "nuevas tres" productos de China pueden ayudar a Serbia a acelerar la transformación de su sistema energético de manera más rentable y eficiente, añadió Dong, señalando que esto podría servir como ejemplo para otros países europeos, allanando el camino para una penetración más profunda en el continente.

Con la creciente inversión de las empresas manufactureras chinas en países como Serbia, Hungría y Polonia, la demanda en aumento de soluciones de energía renovable en estas regiones se ha convertido en un foco clave para la exportación de productos de energía limpia de China, comentó Dong.

Además de los mercados tradicionales de Europa y Estados Unidos, la necesidad de modernizar los sistemas eléctricos y realizar transiciones energéticas en Europa Central, Oriente Medio, Sudáfrica, América Latina y el Sudeste Asiático ha emergido como una prioridad estratégica para la expansión global de las exportaciones de las "nuevas tres" categorías de China.

En una serie de movimientos estratégicos recientes, varias empresas chinas líderes en el sector de nuevas energías han anunciado importantes inversiones y asociaciones en Arabia Saudita. Destacadamente, el fabricante chino de productos fotovoltaicos Sungrow Power Supply ha firmado tres contratos de almacenamiento de energía con Algihaz Holding de Arabia Saudita, que representan el mayor pedido de almacenamiento en red del mundo. Cada proyecto tendrá una capacidad de 2.6 gigavatios-hora, sumando un total de 7.8 GWh.

"El ascenso de China como potencia en energía limpia es el resultado de su compromiso con un enfoque abierto e innovador. Las políticas comerciales proteccionistas, por otro lado, solo sirven para socavar la competitividad a largo plazo de las industrias", señaló Chen Wenling, economista jefe del Centro Chino para Intercambios Económicos Internacionales.