Día Viernes, 19 de Septiembre de 2025
El Banco de México ha aprobado de forma unánime, el 14 de febrero, el quinto recorte de tipos consecutivo en menos de un año.
El precio del dinero quedó fijado en un 7%, su menor nivel desde junio de 2017. El objetivo es dar un impulso a la economía que se enfrenta a un contexto de creciente incertidumbre tanto global como doméstica. La máxima autoridad monetaria señaló varios factores de riesgo entre los que destacan la debilidad generalizada de la demanda interna y el brote de coronavirus.
Como se recordará, la segunda economía latinoamericana ha cerrado 2019 con una contracción del 0,1%, el peor dato desde el inicio de la crisis financiera mundial hace ya una década. La industria ha encadenado 15 meses de retroceso y en 2019 cerró con una caída del 1,8%. El sector de la construcción y el de la minería fueron dos de los más afectados con caídas del 5%. En cuanto al sector automotriz, el gran motor de las exportaciones mexicanas, la evolución también ha sido muy decepcionante con ventas de vehículos nuevos casi un 8% menores que en 2018. Existen notable dudas de que este recorte vaya a impulsar la inversión cuya debilidad está más relacionada con la pérdida de confianza y la incertidumbre que generan las señales contradictorias que envía el Gobierno.
Odebretch golpea de nuevo
El exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio Lozoya, fue detenido, el 12 de febrero en España, acusado de realizar operaciones con recursos de procedencia ilícita, ejercicio indebido del servicio público y cohecho. Parte de la investigación se refiere al destino del dinero entregado por Odebrecht, con lo que Lozoya es el primer mexicano detenido por dicha trama que ha causado una oleada de tormentas políticas en numerosos países de Latinoamérica.
Fuente: CESCE