Día Jueves, 08 de Enero de 2026
Durante una reunión extraordinaria en El Cairo, los ministros de Asuntos Exteriores de la Liga Árabe han condenado con una retórica muy violenta las “injerencias” de la milicia chiita libanesa de Hezbolá, y han acusado a Irán de desestabilizar la región.
Según el secretario general de la organización, el egipcio Ahmad Abu Al-Gheith, las capitales árabes son objetivos de los misiles balísticos iranís, en alusión al misil enviado por los hutis yemenís contra Riad. Según los saudís, el artefacto fue enviado en piezas sueltas por
Teherán a Yemen y reconstruido con la ayuda de Hezbolá. El texto consensuado al final de la reunión acusa a la milicia chiita libanesa de crear grupos terroristas en Barhéin, de fomentar atentados en Arabia Saudí, con la colaboración de los Guardianes de la Revolución iranís, y de proveer en armas a varias organizaciones chiitas en Medio Oriente. El Líbano, representado por su delegado permanente ante la Liga Árabe, e Irak no se han sumado a estas declaraciones.

































