Día Martes, 09 de Diciembre de 2025
Aspectos clave en el proceso de expatriación y gestión internacional de personas
Las personas son esenciales en un proyecto de internacionalización; además la movilidad internacional está aumentando, especialmente en las pymes, por lo que, incluso para los directivos con más experiencia y para las empresas más internacionalizadas, la gestión de la movilidad internacional se convierte en un reto.
Todos los proyectos Internacionales necesitan personas que se desplacen para implementar los planes de negocio establecidos, personas comprometidas con el proyecto, con los conocimientos adecuados, idiomas y aptitudes, así como con una actitud proactiva y flexible. En las diversas fases del proyecto se pueden requerir diferentes perfiles, ya sea para la apertura del mercado, para la formación o para transmitir la cultura y los valores corporativos, entre otras situaciones.
Asumir asignaciones internacionales, ya sean de corta, media o larga duración, no es fácil para las personas, especialmente las de larga duración. Aunque la situación económica en nuestro país ha provocado un aumento de la disponibilidad de personas dispuestas a participar en una asignación internacional, la empresa debe cuidar a sus trabajadores en sus experiencias internacionales.
Para ello es necesario anticipación y planificación, lo que implica un conocimiento previo de los aspectos clave antes de definir la propuesta de desplazamiento y analizar las implicaciones, especialmente pero no únicamente, de los aspectos migratorios, fiscales y laborales.
La anticipación también es importante en todos los desplazamientos, aunque sean de muy corta duración. Hay que tener en cuenta que actualmente se producen muchos desplazamientos de perfiles técnicos en el marco de adjudicaciones de proyectos y de obras en el extranjero. El análisis y la gestión del visado correcto constituyen una de las primeras necesidades también en estos desplazamientos.
Recomendamos informar, formar y compartir con el trabajador todos los aspectos que le afecten. Una buena política de comunicación durante todo el proceso se valora muy positivamente y ayuda a comprometerse con el proyecto.
La internacionalización tiene que ser una estrategia de toda la organización y se requiere una cooperación interna para competir mejor. Por este motivo, hay que analizar y definir políticas de expatriación en la empresa. Estas políticas deben promover el desarrollo del talento, tienen que ser equitativas con el equipo y competitivas con el sector y, al mismo tiempo, responder a un criterio de costes racionales en función de cada tipo de empresa y proyecto. Recomendamos documentar estas políticas en un manual de expatriación que defina los tipos de desplazamientos y asignaciones internacionales, el perfil y las competencias de los expatriados, las condiciones generales (duración, retribución, etc.), la conducta profesional y las obligaciones del expatriado, así como prever la finalización de la asignación internacional.
También es importante realizar el análisis desde el punto de vista del expatriado, puesto que hay determinados momentos clave: el proceso de selección, la decisión de aceptación, la gestión de las expectativas, la adaptación al puesto de trabajo y al país de destino, el retorno, la readaptación o la alternativa a una nueva asignación. La familia y especialmente el cónyuge tienen un papel clave tanto en la decisión como en el éxito de la adaptación y en los resultados de la asignación. Las empresas deben tenerlo en cuenta y apoyarlos tanto como sea posible.
No podemos olvidarnos de mencionar los aspectos culturales. Para poder lograr con éxito los objetivos en el país de destino, no solamente se necesita experiencia, formación, idiomas, una mentalidad abierta y una actitud proactiva, sino también curiosidad e interés por conocer la historia, la cultura y las costumbres de este país. Todo ello es imprescindible para poder interactuar con los diferentes interlocutores que se tendrán. Una parte esencial del trabajo de muchos expatriados con responsabilidades directivas será gestionar y coordinar personas. Si la gestión de personas ya es un reto dentro de la empresa, el hecho de gestionar personas de diferentes culturas (matriz-filial) o equipos multiculturales convierte el reto en todo un desafío. Este interés y curiosidad por acercarse a la historia, la cultura y las costumbres es determinante, ya que ayuda a la adaptación, al Trabajo en equipo y puede evitar conflictos o malentendidos innecesarios.
Montserrat Feliu Costa, socia directora de Feliu N&I






























