El respeto de los valores corporativos y una fuerte presencia local, clave de éxito para las compañías globales

La adaptación a los mercados locales y la instauración de los valores corporativos es una combinación clave para el éxito de las compañías multinacionales. Así lo han afirmado Pierre-André de Chalendar, Presidente Director General de Saint-Gobain, y Antonio Brufau, Presidente de Repsol, durante la celebración del Debate Miradas Cruzadas “Cultura de Empresa y Economía Global”, organizado por Diálogo, Asociación de Amistad Hispano-Francesa, y patrocinado por Saint-Gobain con motivo de la celebración de su 350 aniversario.

En este sentido, los ponentes destacaron que la identidad es una característica muy importante de las empresas globales y, como parte de ella, es fundamental que los valores corporativos se extiendan a todas las sucursales de los países en los que operan. “Es importante que todos los miembros de las compañía conozcan los valores y que los expresen más”, declaró Chalendar.

Siguiendo con esta idea, Brufau añadió: “Es fundamental que los valores se trasladen allá donde las empresas operan. Los principios tienen que ser exactamente los mismos. Las fortalezas pueden ser distintas, pero no se puede jugar con la imagen de la empresa y con lo que la empresa pretende ser a lo largo de todo el mundo”.

De entre los valores que deben estar implantados en una compañía, Chalendar destacó el respeto, la lealtad, la solidaridad, la integridad y el compromiso profesional, así como una manera de actuar basada en el respeto a las leyes, a la gente y al medio ambiente, entre otros aspectos. “Cosas muy sencillas, pero muy importantes”, según sus palabras. A estos puntos, Brufau solo añadió la capacidad para potenciar las relaciones con los gobiernos locales.

Los ponentes destacaron que la identidad es una característica muy importante de las empresas globales

Eso sí, esta implantación internacional de los valores corporativos tiene que realizarse desde una fuerte presencia local. “Cuando nos enfrentamos a un proceso de adquisición de una empresa extranjera, es fundamental que nos adaptemos a otras culturas, que extraigamos el máximo know-how y que nuestra gente y su gente se integren para conseguir una compañía mejor”, apuntó Brufau.

“No hay diferencia entre las empresas españolas y francesas en eso”, afirmó Chalendar, quien añadió: “Debemos tener una manera local de ver las cosas. Tenemos que ser españoles en España e indios en India”.

En cuanto a los motivos que condicionan a Repsol y Saint-Gobain a la hora de invertir en uno u otro país, Brufau resaltó la seguridad jurídica, seguida de las oportunidades tecnológicas o de encontrar talento. Por su parte, para Chalendar, es imprescindible que los países de destino, además de tener un fuerte crecimiento, permitan hacer negocio aplicando los valores de la compañía.

En lo que respecta a la economía en la Zona Euro, Chalendar destacó que hay tres factores que van a favorecer su recuperación: el nivel del euro con respecto a todas las monedas del mundo, el precio del petróleo y las tasas de interés y las políticas del Banco Central. “Eso va a ayudar a las economías de Europa, aunque habrá diferencias entre los países dependiendo de las reformas que se han hecho. Desde ese punto de vista, España va a tener un crecimiento más alto de la media europea, mientras que Francia estará por debajo”. Asimismo, para Chalendar, esos factores exteriores van a tener un papel distinto dependiendo del sector.

Siguiendo con este tema, Brufau afirmó que le gustaría creer que el petróleo y el gas volverán a una situación de normalidad.“Creo que Europa está bien, aunque podría estar mejor. Europa no se puede conformar con crecimientos del 2%, porque así no se genera empleo, ni riqueza, ni nada. Tampoco España se puede conformar con un 3%. Debemos apostar por un crecimiento de la industria muy fuerte y mientras que esta no retome su peso en el PIB, a Europa le costará mucho levantarse”, concluyó.