La Comisión Europea alcanza los 78.500 M€ en emisiones de bonos verdes NextGenerationEU y confirma su impacto climático

La Comisión Europea ha emitido un total de 78.500 millones de euros en bonos verdes NextGenerationEU hasta principios de diciembre de 2025. Esta herramienta de financiación, diseñada para respaldar los planes de recuperación y resiliencia de los Estados miembros, ha logrado evitar la emisión de 14 millones de toneladas de CO2 al año hasta la fecha, consolidando el papel del euro en los mercados financieros globales sostenibles.

Volumen de emisión y asignación de recursos

La magnitud de las emisiones de estos instrumentos financieros está directamente vinculada al gasto ecológico notificado por los Estados miembros bajo el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR). Según los datos reportados hasta el 1 de agosto de 2025, el gasto susceptible de optar a esta financiación asciende a 262.800 millones de euros. Este volumen podría fluctuar conforme los países revisen sus planes de cara al calendario final de 2026.

El informe de 2025 destaca que la emisión realizada de 78.500 millones de euros se alinea estrechamente con los 80.000 millones de euros de gastos ecológicos efectivamente notificados y ejecutados por los socios comunitarios. La Comisión Europea mantiene una política de calibración de los bonos en función del gasto real, asegurando la liquidez y la calificación del activo.

Impacto medioambiental y reducción de carbono

El objetivo central de los bonos verdes NextGenerationEU es financiar inversiones pertinentes para el clima, como infraestructuras verdes y energías renovables. Se estima que la plena ejecución de todas las acciones previstas reducirá las emisiones de gases de efecto invernadero en 53,4 millones de toneladas al año, lo que equivale al 1,5 % de las emisiones agregadas de la UE en 2022.

Hasta el momento, el impacto realizado es tangible. Las metodologías de cuantificación, validadas por auditores independientes, señalan que las medidas implementadas hasta agosto de 2025 ya evitan 14 millones de toneladas de CO2 anuales. Para garantizar la solidez de los datos, la Comisión aplica un enfoque conservador en sus estimaciones; por ejemplo, ante la falta de desglose específico entre energía eólica y solar, se asume la métrica de paneles solares para evitar sobreestimar el impacto.

Estrategia de mercado y transparencia

La emisión de estos bonos no solo busca financiar la transición ecológica, sino también transformar el mercado de capitales europeo. Al menos el 37 % del gasto de los planes nacionales debe destinarse a inversiones sostenibles, alineadas con los planes nacionales de energía y clima.

Entre los objetivos estratégicos de estas emisiones destacan:

• Llevar al mercado un activo verde líquido y de alta calificación.
• Permitir a los inversores diversificar sus carteras con garantías de sostenibilidad.
• Ampliar la base de inversores de la Comisión Europea.
• Reforzar el papel internacional de la UE y del euro en las finanzas sostenibles.

Claves y preguntas frecuentes sobre el informe de bonos verdes 2025

¿Qué garantiza la fiabilidad de los datos de impacto ambiental presentados?
Las metodologías se basan en literatura académica y aplican un enfoque conservador (por ejemplo, en el cálculo de mix de renovables). Además, la información sobre asignación e impacto ha sido sometida a un informe de fiabilidad limitado por un auditor independiente, garantizando la transparencia hacia los inversores.

¿Seguirá la Comisión emitiendo bonos verdes después de 2025?
Sí. A medida que la Comisión reciba los gastos notificados requeridos de los Estados miembros, se producirán nuevas emisiones. Esto continuará incluso durante la fase de refinanciación prevista del programa NextGenerationEU después de 2026.

¿Qué métricas utiliza el informe para medir el éxito?
El informe cuantifica el impacto traduciendo la producción de las medidas financiadas (como MWh de capacidad solar instalada o kilómetros de ferrocarril mejorado) en emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) evitadas, expresadas en toneladas equivalentes de CO2 por año.