Día Jueves, 08 de Enero de 2026
En 2019 Alemania creció un 0,6%, la cifra más baja en los últimos seis años.
A pesar del claro enfriamiento de la gran economía de la UE, resulta importante destacar que este dato supone un crecimiento ininterrumpido a lo largo de la última década.
La economía alemana ha sido una de las más afectadas por la guerra comercial y la desaceleración global, como consecuencia de la enorme apertura exterior que presenta. En noviembre evitó la recesión por la mínima, algo que hizo sonar todas las alarmas en el resto de Europa.
Sin embargo, el Ejecutivo considera que aún es pronto para llevar a cabo un gran plan de estímulos y confía en el impulso que supondrán los planes en inversión pública que ya están sobre la mesa. Entre ellos destaca un gigantesco plan de diez años y 86.000 mill.€ para modernizar el ferrocarril. En cualquier caso, el crecimiento a corto plazo se verá condicionado, inevitablemente, por la evolución de los que han sido los dos mayores focos de incertidumbre económica en el panorama mundial: el Brexit y la guerra comercial entre EE.UU y China.
Fuente: CESCE











































