Día Viernes, 03 de Octubre de 2025
Economistas de la Organización Mundial del Comercio (OMC) anunciaron una revisión al alza en sus previsiones para 2025, proyectando un crecimiento del 0.9%, un incremento significativo desde la contracción del 0.2% anticipada en abril.
A pesar de la incertidumbre global y el aumento de las tensiones comerciales, el crecimiento del comercio mundial de mercancías ha mostrado una resistencia inesperada.
Esta mejora se debe principalmente a una estrategia de anticipación de importaciones por parte de Estados Unidos, donde las empresas han acelerado sus compras para evitar los aranceles que entraron en vigor esta semana. Este fenómeno ha proporcionado un modesto, pero crucial, impulso a las perspectivas comerciales para el año en curso.
Sin embargo, la directora general de la OMC, Ngozi Okonjo-Iweala, advirtió que esta resiliencia podría ser temporal. "El impacto total de las recientes medidas arancelarias aún se está desarrollando", afirmó. "La sombra de la incertidumbre arancelaria sigue pesando mucho sobre la confianza empresarial, la inversión y las cadenas de suministro".
Con el tiempo el aumento de los aranceles acabará incidiendo en el comercio, y ha hecho que la tasa de crecimiento del volumen de comercio estimada para el próximo año pase del 2,5% al 1,8%
Un Impulso Temporal y un Riesgo Latente
La revisión al alza para 2025 contrasta con una perspectiva más cautelosa para 2026. A medida que el efecto de la anticipación de importaciones se disipe, se espera que el impacto de los aranceles se sienta plenamente, reduciendo la previsión de crecimiento del volumen de comercio para el próximo año del 2.5% al 1.8%.
Las economías asiáticas se perfilan como el principal motor del crecimiento en 2025, mientras que América del Norte tendrá un impacto negativo, aunque menor de lo previsto gracias a la anticipación de importaciones en Estados Unidos. Por otro lado, la contribución de Europa ha pasado de ser moderadamente positiva a ligeramente negativa.
La directora Okonjo-Iweala destacó la importancia de haber evitado hasta ahora un ciclo más amplio de represalias arancelarias recíprocas. La OMC continuará monitoreando de cerca la situación y trabajando con sus miembros para salvaguardar la estabilidad del sistema comercial global.