Del Martes, 16 de Septiembre de 2025 al Jueves, 18 de Septiembre de 2025
La Directora General Adjunta de la OMC subrayó que, en un contexto de crecientes tensiones entre naciones, la OMC es más necesaria que nunca como un foro donde los gobiernos pueden trabajar juntos, incluso a través de las divisiones geopolíticas.
En el marco de la tercera Conferencia sobre Geoeconomía, organizada por el Instituto Kiel y el Centro para la Investigación en Política Económica (CEPR) en Berlín el 18 de octubre, la Directora General Adjunta de la Organización Mundial del Comercio (OMC), Angela Ellard, destacó la relevancia de reforzar la cooperación global como un pilar esencial para la resiliencia económica en tiempos de tensiones geopolíticas.
Ellard subrayó que, en un contexto de crecientes tensiones entre naciones, la OMC es más necesaria que nunca como un foro donde los gobiernos pueden trabajar juntos, incluso a través de las divisiones geopolíticas. "La OMC no es perfecta, y nuestros miembros tampoco lo son. Pero en la OMC, todos tienen un lugar en la mesa", afirmó, poniendo en valor la capacidad de la organización para reunir perspectivas diversas y fomentar la toma de decisiones basada en el consenso.
Ellard instó a los economistas y académicos presentes a no subestimar la importancia de la OMC y del sistema multilateral de comercio en el entorno global actual
A pesar de los desafíos de alcanzar consensos entre los 166 miembros de la OMC, cada uno con sus propias prioridades y niveles de desarrollo, Ellard insistió en que es posible, particularmente en temas globales como el medio ambiente y la sostenibilidad. Como ejemplo, mencionó el Acuerdo sobre Subvenciones a la Pesca, concluido en junio de 2022, que aborda la problemática de las subvenciones pesqueras insostenibles. "El consenso es difícil, pero alcanzable, especialmente cuando están en juego cuestiones de importancia mundial, como poner fin a las peores formas de subsidios pesqueros insostenibles", afirmó.
Ellard también advirtió sobre los riesgos de una fragmentación económica global, señalando investigaciones de la OMC que indican que una división económica en dos bloques reduciría el PIB mundial en al menos un 5%. Los países en desarrollo serían los más perjudicados, con caídas del PIB de hasta dos dígitos. "La re-globalización, no la fragmentación, puede contribuir de manera más eficaz a un mundo seguro y próspero", enfatizó.
Durante su intervención, Ellard instó a los economistas y académicos presentes a no subestimar la importancia de la OMC y del sistema multilateral de comercio en el entorno global actual. "Una OMC robusta es un elemento esencial para unir a los países y garantizar una economía global más estable y resiliente", concluyó.
La Conferencia Kiel-CEPR sobre Geoeconomía es un foro destacado para debatir la intersección entre cuestiones económicas y geopolíticas, y en su tercera edición ha vuelto a reunir a expertos de primer nivel para abordar los retos y oportunidades del panorama global actual.