Del Miércoles, 24 de Septiembre de 2025 al Jueves, 25 de Septiembre de 2025
Durante el encuentro celebrado en Madrid, el ministro subrayó la importancia de la anterior Presidencia española del Consejo de la Unión Europea, que situó a América Latina en el centro de la agenda europea.
El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha convocado a los embajadores de América Latina y el Caribe acreditados en España, así como a instituciones del espacio iberoamericano, tras la elección de España como sede para la Cumbre Iberoamericana de 2026.
Albares expresó su agradecimiento por la confianza depositada en el Gobierno de España y destacó la ilusión con la que se asume este compromiso. "Trabajaremos y avanzaremos en este foro de diálogo, concertación política y cooperación, único en el mundo por su naturaleza y alcance", afirmó el ministro.
Durante el encuentro celebrado en Madrid, el ministro subrayó la importancia de la anterior Presidencia española del Consejo de la Unión Europea, que situó a América Latina en el centro de la agenda europea. Como prueba de ello, mencionó el éxito de la Cumbre UE-CELAC, celebrada en julio del año pasado, donde se adoptaron la Hoja de Ruta, la Alianza Digital y la Agenda de Inversiones Global Gateway.
El objetivo principal de la próxima Cumbre Iberoamericana será iniciar una nueva etapa de reafirmación del sistema, identificando conjuntamente las áreas de actuación prioritarias
Además, se espera aprobar el Plan de Acción Cuatrienal de la Cooperación Iberoamericana 2026-2029, que dará una relevancia adicional a la cooperación iberoamericana, la cual es la piedra angular del sistema, traduciendo los mandatos de los Jefes de Estado y de Gobierno en iniciativas concretas con impacto positivo en la ciudadanía.
Albares también destacó las intensas relaciones entre España y los países de América Latina y el Caribe, que han desarrollado fuertes vínculos políticos, económicos, sociales, culturales, lingüísticos y humanos. Enfatizó la importancia de promover los principios compartidos de la democracia, el Estado de derecho y el respeto a los derechos humanos.
El ministro resaltó la fortaleza del idioma español como lengua global y alentó a los embajadores a concertar acciones en campos como la diplomacia multilateral, la economía, la ciencia y la tecnología, y la lucha contra la desinformación en español.