Día Lunes, 03 de Noviembre de 2025
Cesce es la cabecera de un grupo de empresas que ofrece soluciones integrales para la gestión del riesgo comercial y la emisión de seguro de caución y garantías en parte de Europa y Latinoamérica.
![[Img #53017]](https://empresaexterior.com/upload/images/06_2023/8437_karim-kaidi-ruiz-director-de-sistemas-y-negocio-digital-en-cesce.jpg)
Además, actúa como agencia de crédito a la exportación por cuenta del Estado, gestionando el seguro de crédito a la exportación y la cobertura de los riesgos a medio y largo plazo de los consumidores electrointensivos.
Con más de 50 años de experiencia en el sector, Cesce tiene una fuerte presencia internacional a través de filiales de Latinoamérica ubicadas en Brasil, Chile, Colombia, México y Perú. El año pasado, la producción total de la región de primas adquiridas, 75 millones de euros, ha sido superior al estimado y ha representado el 30% de la cuenta propia que considera también la producción de Iberia. Entre todas ellas, más la suma de las empresas que forman el Grupo Cesce, han alcanzado un beneficio neto de 75,1 millones de euros en 2022.
Responde a esta entrevista de empresaExterior Karim Kaidi Ruiz, director de Sistemas y Negocio Digital en Cesce.
¿Qué espera Cesce de este 2023?
Karim Kaidi: “El 2023 arrancó con la aparición de un nuevo término, policrisis. Este neologismo trata de simplificar con su etimología – todos nos hacemos a la idea de qué puede significar – algo tan complejo como es la cantidad de riesgos internacionales que en este momento se suceden en paralelo y con fuerte interdependencia entre sí.
Este escenario de constante incertidumbre es especialmente desafiante para el sector asegurador en general y, en particular, para quienes cubrimos riesgos de crédito y caución, ya que suele llevar consigo un aumento considerable de los niveles de siniestralidad. Frente a ello, desde Cesce correspondemos a los actores del mercado aportándoles un marco de seguridad y confianza que contribuya al desarrollo de su actividad.
Bajo esta premisa, confiamos que la segunda mitad de este 2023 será un buen ejercicio para nosotros y para el sector asegurador en su totalidad. En cualquier caso, el transcurso de esas amenazas globales que comentaba, será lo que indudablemente marque este último semestre del año”.
¿Cuáles son los principales desafíos a los que se enfrentan las empresas internacionales a la hora de implementar la innovación?
K.K: “Son varios y diría que resulta complicado establecer ese ránking, ya que esos desafíos cambian según el momento y la comunidad donde una determinada empresa tenga previsto operar. Si obviamos por un momento estos dos factores, creo que uno de los grandes desafíos para las empresas internacionales radica en buscar aquellos mecanismos que les permitan agilizar su proceso de innovación, el cual requiere de tiempo e inversión y, a menudo, resulta difícil de compatibilizar con su actividad habitual. Por otra parte, también considero que las empresas estén prevenidas y conozcan algunas herramientas para gestionar las posibles amenazas que puedan surgir durante su internacionalización, como son los seguros de créditos y su capacidad para proteger el patrimonio de dichas empresas”.
¿Cuáles cree que son las tendencias más disruptivas en su sector de actividad en la actualidad? ¿Cómo de preparada está Cesce para afrontarlas?
K.K: “Existen varias tendencias que llevan siendo durante años objeto de continuo debate y desarrollo en el sector asegurador, terreno donde somos líderes de la transformación digital gracias a la puesta en marcha de acciones como la adaptación a los nuevos entornos (Insurtech y Fintech), la identificación segura de usuarios, el desarrollo de productos sencillos y simples que acoplamos a plataformas de financiación o terceros que nos permiten llegar a otros mercados o el desarrollo de la ciberseguridad, por citar solo algunos ejemplos.
En Cesce hemos afrontado estos desafíos con éxito gracias a posicionar la innovación como uno de los ejes principales de nuestro actual Plan Estratégico, el cual comprende tres pilares fundamentales: liderar transformación cultural; acometer la reingeniería de procesos, a través de la digitalización; y por último, crear ecosistemas novedosos que permitan a Cesce aproximarse a su mercado de una forma disruptiva. Estos esfuerzos los hemos redoblado recientemente con el Plan Impulsa Cesce 2025, el cual marca nuestra hoja de ruta para consolidarnos como líderes en términos de transformación digital dentro del sector asegurador a través de soluciones innovadoras y experiencias únicas”.
¿Qué peso tiene la innovación en la actividad de Cesce? ¿Qué importancia le da a la sostenibilidad? ¿Cuál es su grado de digitalización?
K.K: “En Cesce nos hemos centrado desde el primer momento en llevar a cabo un profundo proceso de digitalización, ya que disponemos de una enorme cantidad de datos que requieren de un tratamiento automatizado que permita agilizar los procesos para dar el mejor servicio a nuestros clientes. Gracias al mismo hemos sido capaces de aprovechar y adaptarnos a los grandes beneficios que ofrecen las soluciones en la nube para migrar parte de nuestras aplicaciones, lo que redunda en una mayor rapidez de acción, escalar de forma ordenada y sin restricciones. Sin ir más lejos, actualmente más del 90% de los riesgos que analizamos se realizan de forma automática, sin entrar en juego la intervención humana. Todo ello, por supuesto, garantizando siempre el máximo nivel de seguridad.
En este sentido, nuestro propio Comité de Dirección ha tenido un papel clave al implicarse desde el principio en impulsar la innovación como un pilar estratégico para el negocio a través de acciones específicas y de gran calado, como la designación de una partida presupuestaria específica para este fin o la creación de la Unidad de Innovación, Negocio y Transformación Digital, adscrita a la dirección de Sistemas y Organización. Junto a ella creamos también un Comité de Innovación donde aprobamos los nuevos proyectos a acometer bajo la participación e implicación de todas nuestras áreas de negocio, lo que muestra el compromiso adquirido por todas las áreas que comprende Cesce.
Gracias a esta estrategia hemos desarrollado multitud de proyectos que nos ha permitido diferenciarnos de la competencia y revolucionar la digitalización del seguro crédito, como es el caso de los productos Deudor Seguro Exprés y Factura Segura Exprés, respectivamente. Este último el primer seguro 100% digital de crédito planteado en el entorno insurtech y fintech contra el impago de ventas a crédito sobre facturas individuales. Una de las características innovadoras de este producto es que permite integrarse en transaccionales ajenos a Cesce, aportando mucho valor en la cadena de suministro de nuestros partners.
En cuanto a la sostenibilidad, tenemos una ambiciosa Política de Responsabilidad Social Corporativa enmarcada en nuestro actual Plan Estratégico 2021-2024, “Transformándonos ante una nueva realidad”, con la que fijamos un porcentaje del 0,7 sobre el beneficio neto de Cesce para llevar a cabo iniciativas de diversa índole, muchas de ellas impulsadas por el propio equipo de Cesce gracias a un modelo de voluntariado corporativo. Sin ir más lejos, en 2022 hemos llevado a cabo unas 33 iniciativas con impacto a nivel tanto nacional como internacional y la dedicación de casi 300 horas de voluntariado.
Sin embargo, en nuestro firme compromiso social y medioambiental, queremos ir más allá con la presentación de nuestro Plan Director de Sostenibilidad que verá la luz este mismo año. El mismo sentará las bases para reforzar a la sostenibilidad como el verdadero eje transversal de la compañía con implicación en todos sus estamentos”.
Dentro de su sector de oferta de servicios de negocio internacional, ¿en qué punto cree que está la empresa española en adquirir capacidades en este nuevo escenario mundial de los negocios?
K.K: La globalización está atravesando su particular momento de crisis, provocada por la guerra comercial entre Estados Unidos y China, los problemas en las cadenas de suministro globales durante la pandemia y la guerra en Ucrania, entre otros frentes. Esta serie de acontecimientos, de hecho, alimentan el discurso de que la globalización está languideciendo y que nos encontramos ante un proceso de desglobalización… y esta es sólo una de las 6 D’s que marcarán los próximos años de la economía global: junto al fenómeno de la desglobalización, se encuentra también acelerar la digitalización inevitable, mitigar las desigualdades fruto de las crisis consecutivas, defender la democracia, abordar estratégicamente el reto demográfico y comprometernos con la transición hacia la descarbonización.
En este nuevo escenario mundial, las empresas son conscientes de la importancia que tiene la correcta toma de decisiones a la hora de comercializar más allá de nuestras fronteras, por eso valoran tanto nuestros más de 50 años de historia y el consiguiente conocimiento que tenemos sobre el mercado tanto nacional como internacional que les ofrecemos. Este valor se materializa, por así decirlo, en una cartera de productos muy diversificados y adaptados a las necesidades específicas de cada una de ellas. Buen ejemplo son la Póliza Fácil, nuestro seguro de crédito orientado a pymes; la Póliza Emprende, dirigida a empresas que están iniciando un proyecto empresarial; o la Máster Oro Integral, la póliza de seguro de crédito más completa del mercado para cubrir los riesgos de impago.
Cabe añadir, si me permite, el servicio que brinda nuestra filial, Informa D&B, que como líder en el suministro de información comercial, financiera, sectorial y de marketing de empresas, proporciona todo el conocimiento necesario de clientes y proveedores, minimizando así el riesgo comercial. También contamos con la Unidad de Riesgo País de la Cuenta del Estado de Cesce en la que nuestros expertos llevan a cabo una valoración de los países a partir del estudio de su situación política así como de su entorno de negocios. Dichas valoraciones se plasman en unos informes, con opiniones y datos relevantes para la toma de decisiones empresariales estratégicas”.
Desde su propia área de actividad, ¿qué recomienda a las empresas que es obligatorio implantar, si aún no lo han hecho, en sus modelos de negocio?
K.K: “La digitalización y el desarrollo de las nuevas tecnologías son factores que suponen un elemento diferencial entre las empresas, tengan el tamaño que tengan, y supone una auténtica disrupción, no solamente tecnológica, también económica a todos los niveles y en cualquier sector. En este sentido, la digitalización es un concepto amplio que en ningún caso debe ser entendido como una simple fase para la empresa en su día a día, sino algo transversal de la misma en su propio modelo de negocio como parte de la cultura corporativa. La tecnología, de hecho, está en constante evolución, y buena muestra de ello es la Inteligencia artificial y cómo cambiará el mundo en las próximas décadas y también la forma de funcionar el mismo.
En el caso español, nuestras pymes han mejorado su nivel de digitalización en los últimos años, un fenómeno acelerado por la pandemia y que obligó a muchas empresas a adaptarse a un entorno digitalizado. Sin embargo, ahora el gran reto se encuentra en cómo amoldar los productos y servicios al ritmo de la demanda del cliente digital, reforzar los canales online y alinear mensajes para poder seguir siendo competitivo y relevante en el nuevo entorno”.
Según la experiencia de Cesce, ¿el nivel de competitividad de las empresas de otros países frente a las españolas supone una amenaza en la actualidad? ¿En qué sectores están viendo con más fuerza este fenómeno de pérdida de competitividad de la empresa española?
K.K: “Lo primero, es necesario entender en qué punto nos encontramos actualmente. La realidad internacional, como decía, está marcada por ese escenario de policrisis que afecta de lleno a las empresas, sean del país que sean. A partir de aquí, un indicador clave para poder medir nuestro nivel de competitividad frente a las empresas extranjeras es la inflación, pues la creciente diferencia de precios respecto a otras economías europeas pone a prueba la fortaleza de nuestras exportaciones.
España siempre ha sido una potencia exportadora, pero esa brecha de precios con otros países miembros de la UE amenaza nuestra posición en el entorno europeo, ya que nuestros bienes y servicios se vuelven más caros. A esta situación se suma el aumento de los costes por el alza de la energía, aunque nuestra independencia de las fuentes de energía rusa, añadida a la ‘excepción ibérica’ ha contribuido a mantener el aumento de precios a raya.
En cuanto a los sectores que más han sufrido las consecuencias de la inflación de los costes, teniendo en cuenta el contexto de comercio exterior, se encuentra el transporte. Me gustaría citar el estudio realizado por el observatorio sectorial DBK de nuestra filial Informa D&B. En el mismo se citan al sector agrícola, dado el elevado coste de los carburantes y el ascenso de precio de otros insumos, mientras que la industria alimentaria en general también sufre un efecto negativo en sus márgenes ya que compra más caras las materias primas. El encarecimiento de las materias primas es, precisamente, el denominador común para otros sectores como el textil, químico o electrónico, entre otros. En cuanto al sector de la automoción y fabricación de maquinaria, con importante peso en nuestro tejido económico, se ha visto afectado por el conflicto entre Rusia y Ucrania, ya que son dos países con importante actividad siderúrgica y de producción de otros metales”.








































