Del Miércoles, 15 de Octubre de 2025 al Jueves, 16 de Octubre de 2025
El pasado 11 de marzo el presidente estadounidense, Joe Biden, aprobó un paquete fiscal de 1,9 billones de $, una de sus principales promesas electorales.
El apoyo del mandatario al plan se produce después de que recibiera el respaldo del Senado y el Congreso, donde los demócratas tienen mayoría.
Este nuevo paquete viene a sustituir al que se aprobó el pasado mes de diciembre, todavía durante el mandato de Trump, que ascendía a 900 mill.$ cuyos efectos ya se habían diluido. El reciente plan de estímulo contempla cheques directos de 1.400$ para las rentas anuales inferiores a 75.000 $; la extensión de los beneficios por desempleo hasta comienzos de septiembre, con bonificaciones semanales de 300$ y asistencia para el alquiler y sanitaria a millones de familias. Se destinarán también 350.000 mill.$ a financiar las necesidades de los gobiernos locales y estatales derivadas de la emergencia sanitaria y se invertirán 65.000 mill.$ en los planes de detección y rastreo del virus así como de vacunación de la población.
Esta cuantiosa inyección ha duplicado las previsiones de crecimiento para la economía estadounidense en 2021, que pasan del 3,5% estimado inicialmente al 6,5%. Evidentemente, el plan de Biden también tendrá un enorme impacto en las cuentas públicas. Se prevé que el déficit fiscal se eleve hasta el 15% del PIB en 2021 mientras que la deuda pública del gobierno escalará hasta el 127% del PIB en este ejercicio.
Fuente: CESCE