Día Miércoles, 05 de Noviembre de 2025
La jornada, en formato online, fue clausurada por la secretaria de Estado de Comercio, Xiana Méndez, quien recalcó el papel que debe jugar el arbitraje en estos momentos de crisis.
La Corte Española de Arbitraje ha organizado la jornada “Arbitraje y Competitividad Empresarial” en la que se ha puesto en valor este instrumento para contribuir a la competitividad empresarial, preferentemente de pequeñas y medianas empresas, especialmente en escenarios de incertidumbre como el actual, marcado por la pandemia de covid-19.
La jornada, en formato online, fue clausurada por la secretaria de Estado de Comercio, Xiana Méndez, quien recalcó el papel que debe jugar el arbitraje en estos momentos de crisis. “En un contexto en que se prevé un aumento de la litigiosidad esta apuesta temprana de España por el arbitraje y la mediación puede dar a dos beneficios claros: el liderazgo de España podría convertir a nuestro país en centro de servicios de arbitraje internacional para la región iberoamericana; y en segundo lugar porque los procesos de resolución de conflictos comerciales eficientes y efectivos generan un claro impacto positivo en términos de competitividad de las empresas españolas y en consecuencia también acompañando su proceso de internacionalización”, afirmó Méndez.
Previamente, la presidenta de la Corte Española de Arbitraje y el presidente de Cesce habían participado en una mesa redonda sobre sistemas alternativos de resolución de conflictos en escenarios de incertidumbre, en el que ambos ponentes habían recalcado las ventajas de estos procedimientos, algo que también había destacado el propio presidente de la Cámara de Comercio de España en la apertura de la jornada. “El éxito del arbitraje se debe fundamentalmente al atractivo de las notas que lo caracterizan: imparcialidad, flexibilidad y eficiencia; esas cualidades hacen del arbitraje un poderoso instrumento para la competitividad empresarial; en efecto, cuanto mayor es la efectividad del arbitraje mayor seguridad jurídica proporciona a la economía”, expuso José Luis Bonet.
En la jornada también se ha puesto de manifiesto las ventajas en cuanto a celeridad y costes. “El procedimiento arbitral termina siendo mucho más rápido: la celeridad es otra de las ventajas. El tiempo medio en la Corta Española es 6, 8 meses, y además los procedimientos arbitrales son en única instancia; ante un litigio complejo uno no puede estar años esperando, se lleva por delante la compañía”, afirmó la presidenta de la Corte Española de Arbitraje, Elena Otero-Novas.
Todos los ponentes coincidieron en que el arbitraje es un sistema de resolución de conflictos ya consolidado, pero que debe promocionarse aún entre las pymes. “Es un instrumento utilísmo, rápido, que ahorra costes, especializado, y las grandes empresas lo podemos utilizar, Cesce es una empresa mediana, pero sobre todo quien más debe usarlo son las pymes, y cuanto más les vayamos explicando las virtudes y ventajas más empresas lo irán descubriendo y conforme los descubran lo irán utilizando”, concluyó Fernando Salazar, presidente de Cesce.










































