Del Martes, 16 de Septiembre de 2025 al Jueves, 18 de Septiembre de 2025
Las respuestas de los expertos a nuestras preguntas sobre situación, que nos afecta y retos del comercio exterior en España.
- ¿Cómo definiría la situación actual del comercio exterior español? ¿Cuál es la tendencia?
“La coyuntura actual del comercio exterior español está marcada por la desaceleración. De enero a junio, las exportaciones de mercancías aumentaron apenas un 1,7% con respecto al mismo periodo de 2018, un nivel de crecimiento inferior al de la media de la zona euro y al de otros países como Francia o Italia. La ralentización de las exportaciones es una tendencia que viene ya desde comienzos del año pasado. España está perdiendo cuota de mercado en el comercio mundial”.
- ¿Qué cree que está afectando más a las exportaciones españolas?
(Situación político-económica española, guerra comercial EEUU-China, Brexit, disminución demanda nuestros principales mercados (Alemania, etc.), otros factores)
“Todos los factores señalados están contribuyendo a la desaceleración de nuestras exportaciones, pero a ellos se suma, de forma muy sobresaliente, a nuestro juicio, la ausencia de un Gobierno estable en España que afronte una agenda reformista en materia económica y empresarial que revitalice la exportación y la internacionalización de nuestro tejido productivo. Detectamos carencias de tipo regulatorio que lastran la productividad de nuestras empresas. Como han demostrado algunos estudios académicos, no es sostenible que nuestra principal baza competitiva se asiente en la rebaja salarial, pues en ese nivel la competencia con países emergentes es brutal. Por tanto, deberíamos esforzarnos por mejorar nuestra productividad y apostar por productos de mayor valor añadido, que incorporen innovación e imagen de marca”.
- ¿Cuáles son los retos de las empresas exportadoras españolas?
“El milagro de la exportación española durante los últimos años se ha sustentado en el propio mérito de las empresas. Espoleadas por el desplome del mercado interior, se vieron obligadas a buscar clientes fuera de nuestras fronteras. Gracias a esa reacción, hoy tenemos más firmas vendiendo por el mundo que antes de la crisis. En esa búsqueda de una mayor productividad, las empresas tienen que apostar por la innovación, tanto en materia de productos y servicios como en procesos, y deben buscar un posicionamiento basado tanto en el diseño como en la marca.
Ahora bien, a los deberes de las empresas habría que sumar los que corresponden a las Administraciones Públicas, en tanto que afectan al marco regulatorio en que las empresas desarrollan su actividad”.
Si considera que la situación de las exportaciones españolas está empeorando, ¿qué medidas habría que tomar para revertir la situación y mejorar la internacionalización de las empresas españolas?
El marco regulatorio adolece de rigideces que atenazan el día a día de nuestra economía. Por ejemplo, el tamaño de las empresas constituye un factor determinante de la competitividad, y la realidad es que nuestras empresas son un 22% más pequeñas que la media de la UE. De esa ausencia de tamaño se derivan consecuencias muy negativas para la competitividad empresarial. Hablamos, por ejemplo, de limitaciones financieras para encarar procesos de innovación o de internacionalización, que precisan de recursos suficientes. El obstáculo que se opone a que las empresas ganen tamaño es en gran medida regulatorio (normativa laboral, fiscal, financiera). A las empresas les compensa seguir siendo pequeñas para no tener que enfrentarse a una serie de requisitos y rigideces legales.
Asimismo, tenemos uno de los sistemas energéticos más caros de toda Europa, y eso también lastra la competitividad empresarial, lo mismo que sería necesario fomentar la innovación, aportando más recursos en I+D+i, y proceder a una reforma del sistema educativo con el fin de aproximar los contenidos formativos a las exigencias del mercado.
En conclusión, creemos que España se juega tanto en materia de competitividad empresarial y de desarrollo social que pedimos una política de Estado en torno al objetivo de internacionalización, que involucre a todos los Ministerios con competencias sobre el asunto”.