Día Lunes, 17 de Noviembre de 2025
Harta de la desobediencia política del ala más dura de los conservadores euroescépticos, la primera ministra británica, Theresa May, ha abierto la puerta a negociar con el líder laborista Jeremy Corbyn para intentar conseguir su apoyo al plan del Brexit que el Parlamento ha rechazado ya en tres ocasiones.
Si no consigue la aprobación del texto, Reino Unido se enfrentaría a una salida desordenada de la UE el 12 de abril. En caso de que se sometiese de nuevo a votación y, en esta ocasión, los diputados británicos votasen a favor del texto, la extensión sería hasta el día 22 de mayo. Ante el marasmo de la situación política, el pasado lunes 1 de abril el Parlamento celebró de nuevo una serie de “votos indicativos” para explorar opciones alternativas al Plan de la primera ministra. Se trataba de la segunda ronda de dichos votos, ya que en la primera, celebrada la semana anterior, de las ocho opciones que se habían presentado, ninguna había obtenido el apoyo necesario.
En esta ocasión se debatieron cuatro opciones alternativas: la pertenencia a la unión aduanera, al mercado único, la celebración de un segundo referéndum y dar el poder al Parlamento para que extienda el Artículo 50. Al igual que la semana anterior, ninguna de las opciones consiguió prosperar.A menos de cuatro días de la salida, la situación política en el país sobrepasa lo caótico. El pasado viernes 5 de abril la primera ministra solicitó una nueva extensión del Art.50 hasta el 30 de junio para evitar la ruptura brutal el 12 de abril. Los Veintisiete deberán acordar una postura común en la cumbre extraordinaria que se celebrará el próximo día 10. El bando europeo se divide entre la postura dura liderada por Francia y respaldada por España y Bélgica que aboga por terminar ya con este calvario. En el otro lado se sitúan Alemania, Holanda e Irlanda, que prefieren explorar todas las vías y evitar a toda costa una salida desordenada, una visión que comparte el presidente del Consejo, Donald Tusk, quien considera que la prórroga ha de ser de por lo menos un años. Lo que está más o menos claro es que, si se vuelve a prorrogar el Artículo 50, Reino Unido tendrá que participar en las elecciones al Parlamento Europeo de mayo, lo que contradice lo que, hasta el momento, afirmaba la primera ministra “Reino Unido no participará en los comicios europeos”. Una contradicción más que se suma a las centenares que acumula en su haber.
Fuente: CESCE









































